El tango es un género musical y de baile que nació en Argentina, específicamente en la ciudad de Buenos Aires, y se difundió ampliamente a finales del siglo XIX y principios del XX. Es una amalgama cultural que fusiona elementos de la música africana, española y las raíces nativas de Argentina.
Desde el punto de vista musical, el tango se distingue por su ritmo lento y melódico, acompañado de una melancólica y conmovedora melodía. El instrumento fundamental en el tango es el bandoneón, un tipo de acordeón que crea el sonido distintivo del género. También se utilizan guitarras, violines, contrabajos y pianos para enriquecer su sonoridad.
En cuanto al baile, el tango es famoso por su sensualidad y complejidad. Los bailarines se abrazan y se deslizan por la pista en movimientos fluidos y coordinados, reflejando la pasión y el romance presentes en las letras de las canciones de tango.
El tango ha evolucionado a lo largo de los años, incorporando nuevos estilos y fusionándose con otros géneros musicales. Hoy en día, sigue siendo un símbolo de la cultura argentina y se disfruta y baila en todo el mundo.
Beatriz Adriana Lichinchi, mejor conocida en el ambiente musical como Adriana Varela o su apodo La Gata Varela, es una reconocida cantante y compositora argentina de tango. Nació el 9 de mayo de 1952 en Avellaneda Buenos Aires, Argentina. A lo largo de su trayectoria musical, cuenta con un promedio de dieciocho álbumes en su haber, ganado fama internacional. Además es considerada como precursora de la cultura en su país, participando en festivales y demás actos para promoverla en Argentina y otros países del mundo. Niñez, Juventud y Vida Familiar Adriana Varela antes de dedicarse a la música, estudió las carreras universitarias de Psicoanálisis y Lingüística. Inicios de Adriana Varela en la Música En 1986, Adriana Varela dio sus primeros pasos en la música, gracias al conductor y locutor de televisión argentino, Juan Alberto Badía, quien logró que la cantante debutara en el mundo de la música, Oscar Cardozo Ocampo, pianista, compositor y arreglista argentino, contribu...
Que el mundo fue y será una porquería
ya lo sé...
(¡En el quinientos seis
y en el dos mil también!).
Que siempre ha habido chorros,
maquiavelos y estafaos,
contentos y amargaos,
valores y dublé...
Pero que el siglo veinte
es un despliegue
de maldá insolente,
ya no hay quien lo niegue.
Vivimos revolcaos
en un merengue
y en un mismo lodo
todos manoseaos...
¡Hoy resulta que es lo mismo
ser derecho que traidor!...
¡Ignorante, sabio o chorro,
generoso, estafador!
¡Todo es igual!
¡Nada es mejor!
Lo mismo un burro
que un gran profesor
No hay aplazaos
ni escalafón,
los inmorales
nos han igualao.
Si uno vive en la impostura
y otro roba en su ambición,
da lo mismo que sea cura,
colchonero, rey de bastos,
caradura o polizón
Qué falta de respeto,
qué atropello a la razón
¡Cualquiera es un señor!
¡Cualquiera es un ladrón!
Mezclao con Stavisky va Don Bosco
y "La Mignón",
Don Chicho y Napoleón,
Carnera y San Martín...
Igual que en la vidriera irrespetuosa
de los cambalaches
se ha mezclao la vida,
y herida por un sable sin remaches
ves llorar la Biblia
junto al calefón...
Siglo veinte, cambalache
problemático y febril,
el que no llora no mama
y el que no afana es un gil
¡Dale nomás!
¡Dale que va!
Que allá en el horno
nos vamo' a encontrar
No pienses más,
sentate a un lao,
que a nadie importa
si naciste honrao
Es lo mismo el que labura
noche y día como un buey,
que el que vive de los otros,
que el que mata, que el que cura
o está fuera de la ley...