Las rancheras son un género musical tradicional de México con un origen rural que se caracteriza por su expresión sentimental y melodramática. Este estilo musical tiene influencias de la música española, mexicana y estadounidense, y suele acompañarse de instrumentos como la guitarra, el acordeón, el violín y la trompeta.
Las letras de las rancheras suelen abordar temas como el amor, la pérdida, la nostalgia y la patria. Las canciones pueden tener ritmos alegres y pegajosos, pero también pueden ser lentas y melancólicas.
Las rancheras han sido interpretadas por muchos artistas populares mexicanos y han alcanzado la fama en todo el mundo. A lo largo del tiempo, este género ha evolucionado incorporando elementos de otros estilos como el pop y la música electrónica, siempre conservando su esencia emotiva y sentimental.
En 1986, la tierra salteña, abrazada por el trópico, fue testigo de los primeros acordes de Los Nocheros. El ámbito de sus comienzos estuvo musicalizado por Los Chalchaleros, Los Fronterizos, Los de Salta, Los Cantores del Alba, Los Nombradores, Daniel Toro; fue entonces cuando supieron forjar esa personalidad y ese sonido auténticamente salteño, que los llevo a recorrer todo el país. Sus primeras incursiones artísticas, luego del coro polifónico de Salta, fueron como dúo, conformado por Mario y Rubén. Al poco tiempo fueron integrando nuevas voces hasta conformar el cuarteto actual. La agrupación está integrada por Mario Teruel (barítono, guitarra-arreglos, composición), Jorge Rojas (tenor, voz y composición), César Kike Teruel (barítono, guitarra/charango, composición), y Rubén Sergio Ehizaguirre (tenor, voz y composición). Con una dinámica artística asombrosa fueron colmando todo tipo de festival, teatro, estadio o anfiteatro en el que actuaran. En 1994 irrumpi...
La noche iba juntando estrellas dormidas
Y vi pintarla aurora sus rojas mejillas
Lento caminar eterno resplandor
Mostraba al Sol su inmensidad
Miraba de reojo celosa la Luna
Sobre la cuna del algarrobal
Morena y orgullosa de tantas miradas
Llegaba presurosa vistiendo de gala
De misterio azul el rostro se cubrió
Donosa comenzó a bailar
Y aprovecho suspiros para echar en vuelo
Blanco pañuelo aromado de azahar
Detrás de ti va mi nostalgia
Y agito en vano la esperanza
Déjame encender el fuego en tu candor
Y en ese sueño verte arder
Así podré saber que destino me lleva
En tu pollera a enredarme de amor
Deje que mis deseos cobraran altura
Y en gotas de rocío
Bañe tu figura
Para ahogar la sed
Bebí de la ilusión
De ser el dueño de tu amor
Soñé que en tu cintura dejaban mis manos
Todo el verano de mi corazón
Yo quise detenerte paloma en mi nido
Y en un gentil arresto roce tu vestido
Pero tu ansiedad buscando el arrebol
Dejo su luz de eternidad
Se fue tras de tu huella mi voz al nombrarte
Para entregarte mis ganas de amar
Detrás de ti va mi nostalgia