La cumbia es un género musical latinoamericano que se originó en Colombia, pero se ha convertido en un fenómeno musical en toda la región y más allá. Este género es conocido por su contagioso ritmo y su fusión de influencias africanas e indígenas. La cumbia se caracteriza por el uso de instrumentos como la gaita, la flauta de millo, el tambor alegre y la guacharaca, que crean un sonido distintivo y festivo.
Las letras de las cumbias abarcan una amplia gama de temas, desde el amor y la alegría hasta las historias cotidianas de la vida rural. A lo largo de los años, la cumbia ha evolucionado y se ha fusionado con otros géneros musicales, dando lugar a subgéneros como la cumbia sonidera y la cumbia villera. La cumbia ha dejado una huella indeleble en la cultura latinoamericana y sigue siendo una parte integral de festivales, celebraciones y fiestas en toda la región.
El 06 de febrero de 1993, en Piura, Perú, nace la agrupación de cumbia peruana Corazón Serrano y constituida en ese entonces por: Lorenzo, Floro, Noermí, Fredy, Irma, Edwin, Leodan Guerrero Neyra, Edita Guerrero Neyda, (1983 + 2014), de estos conforman la familia Guerrero Neyra, todos hermanos del matrimonio de Pedro Guerrero Meléndez y Eladia Neyra García de Guerrero, también formaban parte; Stalin Zapata, José Luis Huamán, Kiara Gonzales, Lleri Quito, Karla Rodríguez, Naldy Saldaña y Lesly Águila quienes en esa época dieron vida a lo que sería en un futuro un rotundo éxito en el mundo de la cumbia peruana, pero fue luego de un gran trabajo dedicado durante años, en sus inicios el grupo fue rechazado por programadores musicales. Lorenzo Guerrero, uno de los dueños de esta orquesta, recuerda que la respuesta más amable que recibió fue el de un gerente de una radio ubicada en San Isidro, quien le recomendó cambiar de nombre porque con el que tenían no ‘pegarían�...
Quiero quitarme este amor de la cabeza
Este tonto corazón no me lo deja
Me tiene tan encarcelada
Y aún siento como si hablara
Y no lo puedo olvidar
Y no lo puedo olvidar
Diganle que sigo enamorada
Cuentenle que me hace tanta falta
No lo puedo borrar de mi vida
Aunque quiera mi piel no lo olvida
Diganle que muero por sus besos
Cuentenle que espero su regreso
Que su amor es un fuego encendido
Que no puedo apagar dentro mío
Quiero quitarme ese amor de la cabeza
Y este tonto corazón no me lo deja
Me dice que como el no hay otro
Me llena de recuerdos locos
Y no lo puedo olvidar
Y no lo puedo olvidar
Diganle que sigo enamorada
Cuentenle que me hace tanta falta
No lo puedo borrar de mi vida
Aunque quiera mi piel no lo olvida
Diganle que muero por sus besos
Cuentenle que espero su regreso
Que su amor es un fuego encendido
Que no puedo apagar dentro mío